Este el título de un concurso de música del Gobierno de Catamarca.
La consigna, interpretar una versión propia de Paisaje de Catamarca de Rodolfo Polo Gimenez y grabarla con la letra original registrada en sadaic… que como escucharán es “ un pueblito allá otro mas allá ”
“ Hay que participar! ”, se decidió pocos días antes del plazo de entrega. Los actos espontáneos son los mejores.
Mirta y Lucia, maestra de guitarra y la profesora de música, llevan las melodías catamarqueñas, ritmo de caballo por lo cerros, del viento silbando en las piedras, del agua de los arroyos como, espejos de voz, en la profundidad de sus almas,
El domingo tempranito preparábamos el equipo: una pequeña cámara-video, trípode ligero, dos planchas de tergopol y una goma para el pelo…aquí siempre hace mucho aire y Lucia tiene pelo largo, quizás pueda servirle…
El escenario, estuvimos todos de acuerdo, la zanja del río Abaucán, a la sombra de un Algarrobo Blanco donde las voces de Mirta y Lucía, la guitarra y la caja vibrarían bajo su sombra Mágica. La locación, la finca de John.
Grabamos bajo la sombra del algarrobo blanco abundante de flores donde libaban avispas.
Voces y Naturaleza en Comunión.
Aportamos un tono más de verde, el verde del desierto.
La edición la hicimos en casa, compartiendo pollo asado, lechuga y rabanitos de nuestra huerta y vino de John.
Gracias Mirta y Lucía, por habernos dado la oportunidad de compartir un domingo Enriquecedor y Único, una oportunidad de Aprender.
Ahora crucemos los dedos para que el jurado vea la raíz sincera de esta versión de Paisajes de Catamarca.