Peregrinos de luz somos, caminando entre una oscuridad que nuestra propia Alma ilumina.
En torno la mayestática Naturaleza que nos sustenta,
en el Infinito, el Universo de Dios
hacia donde todos ascendemos
barridos por el viento Cósmico.
Todas las SensacioneS que nos estimula
el Territorio Abaucan y quedemos compartir
conTigo
Peregrinos de luz somos, caminando entre una oscuridad que nuestra propia Alma ilumina.
En torno la mayestática Naturaleza que nos sustenta,
en el Infinito, el Universo de Dios
hacia donde todos ascendemos
barridos por el viento Cósmico.
Los gusanitos escribieron en este palo pero yo no se leerlo.
Asi dijo doña Martina.
Y si Dios nos escribiera,
agua, viento, tiempo su pluma,
Su mensaje sobre la arena
Sabríamos leerlo?
La Razón que nos ha sido dada
no alcanza para entender
como lo e scrito por los gusanitos en el palo.
ABSTRACTO se nos queda el mensaje,
forma, color, proporción, textura…
Pictografías que no sabemos interpretar,
Ideografías sin comprender.
Mas ahí están al alcance de nuestra mirada
Cuánto más estará escrito
y no sabemos decifrar?
Actualizado: 9 abr 2022
Reza un proverbio antiguo que no debemos dejar más huella en la vida que la de nuestros pies descalzos sobre la Tierra
La Tierra se formó, según la Ciencia hace 4,543 de millones años.
La Cordillera de los Andes nació al final de la era Mesozoica, era de los dinosaurios, 251 millones de años, hasta finales del Cretácico tardío, 66 millones de años atrás.
Millones de años de arrebato de explosiones megatónicas.
Vientos, glaciares y aguas aún siguen dejando su huella algo más apacibles.
También los animales que sobre la superficie o bajo el mar transitaron su Vida, desde los amonites hasta las vicuñas, pasando por los dinosaurios. Aún se ven señales si se busca con atención.
Nuestro género, el humano, dejamos nuestra impronta, memoria de que ahí estuvimos. No siempre de nuestros pies descalzos. Pocas veces con el respeto que la Creación merece. Quizás nos falte saber Contemplar con un Espíritu más místico.
Quién soy yo para determinar con qué mirada debemos acercarnos a un paraje como el Balcón del Pissis. Allá cada cuál con su conciencia.